Semipunta de Selenita

La Selenita recibe su nombre de la preciosa Titánide griega Selene.  Esta diosa de rostro pálido azulado, representaba la luna (hermana de Helios, el sol) y siempre se la representaba vestida de gasa blanca, subida a un carro de plata tirado por caballos o bueyes blancos. 

A esta piedra se le asocia todo lo que tenga que ver con la magia lunar, los rituales de luna y la purificación y limpieza de espacios. La Selenita es para mí  de las piedras más enigmáticas. Formada por miles de filamentos de piedra, que poco a poco se van descomponiendo como cabellos de cristal. 

Esta piedra absorbe cualquier mala energía de los espacios y los purifica igual que lo hace la luna llena cuando se cuela su luz en las piedras o por las ventanas de nuestra casa. 

Es necesario  manipularlas con mucho cuidado ya que es muy frágil  (sabías que es una variedad de yeso?) y cualquier roce con otra piedra más dura puede marcarla o partirse. 

Esta piedra también se usa para limpiar otras piedras, dejándolas juntas durante una noche entera. Para limpiarla a ella, sácala a la luz de la luna llena y pásale salvia blanca. 

Suele colocarse en la entrada de casa para limpiar la energía que viene de fuera, en los comedores para facilitar la conexión y la comunicación y en los dormitorios para reparar el sueño. 

FORMA SEMIPUNTA: 

Las semipuntas son para mi gusto de las formas más poderosas en las que se tallan las piedras. Por un lado tenemos la base de la piedra en bruto, lo que hace que sea fuerte, y que tenga mucha energía. Y por otro lado se ha tallado la parte de arriba con una punta de distintas caras triangulares que hacen de vórtice canalizador de energía. 

A diferencia de los obeliscos, estas piedras no tienen el "tronco" tallado. No es un tipo de forma que pueda hacerse con todas las piedras.

Usa esta forma para colocar las piedras en tu altar o en la zona que creas oportuna pero teniendo en cuenta que va a actuar como "atractor" y canalizador de energía.